sábado, 30 de abril de 2011

Un pequeño fragmento.

Un día, alguien me contó una historia, quizás de amor pero tenía algo de misterio. La verdad es que al principio me gustó bastante, pero según iba escuchando, las palabras se hacían más y más largas...

"Lo recuerdo todo. Cada palabra, cada gesto, cada día, cada momento, cada risa, cada beso, cada lágrima... todo... por tonto o irreal que fuera. Recuerdo todo lo que tuvo que ver con él en cada momento de mi vida.
Las cosas parecían complicadas, pero cada paso que das en la vida es más comlicado que el anterior.
Era bueno, era... parecía perfecto, me sentía bien hablando con él, siempre había algo que decir, que contar... qué facil es contarle las cosas a alguien que no conoces, resulta sencillo, no tiene nada que reprocharte.

Confianza, alegría... Mi cabeza solo quería gritarle, contarle todo sin hablar, hacer como que sabía todo de mí, pero en realidad no sabía nada, lo mismo que yo de él. Nada.
Que rapido pasa el tiempo cuando estamos haciendo algo que nos gusta, cuando disfrutamos del momento. Cada minuto se convierte en segundos, y sin darnos cuenta se nos hace tarde y tenemos que irnos, pero no queremos... y es que todo en la vida se acaba.
En el amor, todo empieza cuando ves o sientes a alguien, tienes una primera impresión
que la cabeza asimila y estudia, y sigue si baja... y te llega a rozar el alma.
Cada palabra me hacía sentir algo distinto, una sensacion que en ese momento no solo yo sentía. "Le tenía tontito" já... la locura, mi locura, iba apoderándose de mí, la felicidad la alcanzaba, competían por ser más, y... la felicidad lo superó todo... "tontito". Que tontería...
Las vueltas que da la vida. Creo que recuerdo la mejor vuelta de mi vida. Había coches, piedrecitas... pero ninguna farola, solo la luz de la noche y algún que otro coche que arrancaba a nuestro alrededor. La fuerza de dos cuerpos, dos imanes que se atraen... y nuestros labios se rozaron... Le besé. La primera vez que le besé sentí que debía aprovechar el momento... porque era plenamente feliz.

Ojala se hubiera parado el tiempo en ese instante, allí... con su boca entreabierta rozando la mía, moviendose perfecta, sabiendo que hacer en cada momento, mi corazón latiendo cada vez más deprisa, pero más tranquilo. Mis manos poco a poco se iban deslizando por su espalda... hacía frio, mucho frío, pero ¿que importa?, él me abrazaba.
Miradas, me miraba tranquilo, feliz, como transparente, sonriendome en cada momento, hablando con dulzura, tocándome delicadamente como si me fuera a romper. Con alguna que otra broma de vez en cuando, y me reía. Me besaba. Me volvía a besar. Despues me tocaba a mí, le besaba, seguía sonriendome, me mataba esa sonrisa ¿no sabía hacer otra cosa? Si, y todo era perfecto. Todo lo que decía, cada frase era a mi favor, no... no se daba cuenta que hacía quererle.
Se tenía que ir, llegaba tarde... no quería soltarle, y no lo hice, él no quiso: "Prefiero quedarme aquí... contigo, ¿no?" No, otra vez esa sonrisa, esa mirada... ese beso, me volvió a besar, y eso que sentía se multiplicó, no se por cuanto, pero se hizo mucho más grande. Que rápido, era verdad, cuando un momento es especial todo pasa muy deprisa..."


La historia era más larga, pero todo se comenzó a hacer largo y pesado.. así que solo me quedé con este pequeño fragmento.

domingo, 17 de abril de 2011

I'm solo ♫

Ultimamente estoy todas las tardes sola en casa.. cualquier persona normal diría: "¡que suerte!", pero yo pienso.. "¿y que gano?" Sí, podría saltar, cantar, gritar, comer en el salón sin que nadie me diga nada... pero es que.. todo eso lo hago estando sola o con gente en mi casa, soy yo.. ¿que quieres que haga? quien me conoce sabe perfectamente que estoy como una cabra (en el buen uso de la expresión), y que me da igual estar sola o acompañada yo siempre estoy cantando, grito cuando hablo y también.. estoy todo el día comiendo aunque mis padres digan lo contrario.. ¡porque no me apetezca paella, ya es que no como nada! si.. me alimento a base de sandwichs de jamón york y queso :3
Bueno.. que me desvío del tema, la cosa es que no me gusta estar sola en casa..
Asíque si alguien se quiere venir a pasar mis tardes solitarias y hacerme compañía.. bienvenido sea :) 

sábado, 16 de abril de 2011

Una mota de polvo

Escribir.. escribir sobre ti, sobre mí, todo o nada, sobre esa mota de polvo que ni siquiera eres capaz de apreciar. No solemos apreciar lo que tenemos a nuestro alrededor, no nos fijamos en que hay alguien o algo que puede hacernos felices una milésima de segundo en nuestra vida. O sí, quién sabe? Lo hemos visto, contemplado… pero nada, nunca nos hará feliz. Y entonces es cuando nos preguntamos: “¿Y yo? ¿Podría hacer feliz a esa persona?” pero como solo pensamos en nosotros no le damos importancia, la pregunta se queda en el aire, como la mota de polvo que ni siquiera sentimos.

Muchas veces me gustaría gritar una palabra que me haga conseguir lo que quiero y que lo que en ese momento piense sea mío, aunque sea por un rato, no lo quiero para siempre, solo un rato. Y, ¿quien no querría esto? Sería tan fácil todo… a mí, sinceramente, con lo que me cuesta conseguir las cosas, me gustaría que algo fuera fácil. Tener esa palabra aunque fuera una vez en la vida, y plaf! Que aparezcas tú, solo me conformo con que vengas conmigo un momento, que sea largo... lo suficiente para que cuando te vayas a ir no quieras, solo quieras tener esa palabra y hacerme aparecer.